La implantación del Trade Marketing
Amtes de implantar el Trade marketing en las organizaciones debemos tener en cuenta que no todos los sectores tienen la misma necesidad de implantarlo. Han sido todas las empresas dedicadas al gran consumo las que han desarrollado más este concepto, mientras que otros sectores o categorías de producto, esta disciplina todavía no está demasiado desarrollada.
Existen dos modelos básicos de implantación del trade marketing en la organización.
El primero de ellos es hacerlo depender de un director de marketing. El director de marketing sería el responsable de dirigir tanto el marketing a los clientes de canal como el marketing al consumidor final.
Las ventajas de este modelo son tener una mayor coordinación con la estrategia global de marketing, una línea clara presupuestaria que evite los roces entre los dos tipos de marketing que se van a trabajar, mayor coherencia en las acciones y estrategias.
Las desventajas son un alejamiento del trade marketing de la operatividad y de la red comercial y los KAM (Key Account Manager), que son los que finalmente han de cerrar los acuerdos de venta con los distribuidores. Esto provoca que los KAM acaben negociando sin estar alineados con la estrategia de marketing, perdiendo las posibles ventajas competitivas que puede ofrecer en este sentido la puesta en marcha del trade marketing.
La otra opción es ubicarlo en el departamento comercial.
Las ventajas serían que el trade marketing se convertiría en el nexo de unión entre comercial y marketing, favoreciendo un flujo de información adecuado y llevando la estrategia global de marketing a la red comercial. También permitiría estar más cerca de las necesidades del cliente de canal y participar más en la operativa.
Como desventajas aparecen los problemas de coordinar la estrategia de marketing de consumidor con las del trade, la repartición de responsabilidades entre ambos, la asignación de presupuestos, el posible alejamiento del trade marketing de aspectos de mercado de consumidor.